Buenroneando

Personajes que intervienen: Arko, Ross y Buenro.

 

    Soleada mañana en Canarias. Novedad. Ross, la canaria oficial del turno de noche, espera en el aeropuerto a un español de barba sexy y un brasileño. Pero qué brasileño.
Su cabeza da vueltas por el nerviosismo. Su corazón palpita llameante por la impaciencia y su guagua del placer llama con palmadas semi-silenciosas, al pasajero brasileño que a punto está de bajarse del avión.

Entonces llegan. Aparecen a lo lejos. Y mientras Buenro va directo a recibir el tierno abrazo de Ross, Arko es interceptado por féminas libidosas a las que llamó imperiosamente la atención con su barba todo-sexy y su mirar de modelo de colonia. Mientras éste firma escotes con su "username (@arkonero)", la chulanga canariona sigue abrazada al esbelto gigantón. Huele su dulce fragancia, recorre el mapa de su espalda con las manos, aprieta el abrazo para que él sienta sus majestuosos senos. Entonces nota algo duro arponeando su cintura. "Es mi móvil. Jejeje", dice Buenro.

20 minutos después, aparece Arko lleno de pintalabios en la cara, un espacioso sujetador en el bolsillo y hasta unas braguitas rosas, perdón, fucsia, en el hombro.
Cuando se reúnen, salen del aeropuerto para dar un paseo por las grandiosas calles canarias.
Pero Ross, casi en estado 100% húmedo debido a la atractiva influencia del brasileño, manda delicadas indirectas a Arko para que los deje solos: "¿No te apetece reflexionar solo en la playa que está cerquita de aquí, chacho?", "¿No te gustan los números pares, como el 2, mi canelo?"
Entre frases como éstas, llegan a la casa de Ross...